Tom Stewart (Richard Carlson) es un pianista de jazz que se encuentra viviendo en una isla donde conoció al amor de su vida, Meg (Lugene Sanders), con quien va a casarse en apenas una semana y por esa razón se cita en la isla con Vi (Juli Reding), una cantante con la que previamente mantenía una relación, para comunicarle que todo entre ellos ha terminado y que en unos días se celebrará su boda.
Es posible que Tom tuviera otras cosas en la cabeza y por eso no fue sino hasta el último momento que recordó decirle a Vi sobre el nuevo estado de su relación, pero ella definitivamente no se muestra comprensiva al respecto y lo amenaza con mostrarle a Meg todas las cartas de amor que recibió de Tom mientras se relacionaba con ambas mujeres. Esta conversación ocurre oportunamente en un faro abandonado y es inevitable pensar que Tom aprovechará las circunstancias para solucionar el problema de la forma más conveniente para él; no obstante, esto no es necesario ya que Vi hace el trabajo por él al apoyarse en una baranda que cede a su peso y la deja columpiándose en el vacío. Tom lo único que hace es ignorar su pedido de ayuda y la ve caer contra las rocas.
Desde la mañana siguiente Tom es atormentado por toda clase de visiones en las que siempre participa Vi, ya sea caminando junto a él cuando se encuentra acompañado por Meg, viendo flotar su cuerpo en el mar o incluso haciendo sonar un disco suyo llamado apropiadamente Tormented.
Es cuestión de días para que nuestro atormentado galán esté al borde del colapso mental y todos noten lo extraño que se está comportando. Llega al punto de quiebre cuando ve en su casa la cabeza de Vi y esta exclama a viva voz que fue él quien la mató.
Pero la amenaza real la representa Nick (Joe Turkel), el hombre que llevó en su embarcación privada a Vi, sabe que nunca volvió a tierra firme y que tampoco está en la isla. Nick llegó a la conclusión más evidente sobre un hombre que veía peligrar su futuro y su felicidad y ahora exige 5 mil dólares por su silencio. Porque todos sabemos que es una magnífica idea chantajear a un homicida.
¿Se llevarán a cabo las nupcias a pesar de la adversidad o finalmente Tom Stewart sucumbirá ante el terror psicológico de un viejo amor que lo atormenta? Eso le toca a ustedes descubrirlo viendo esta entretenida película, yo por mi parte haré una mención especial a Sandy (Susan Gordon), la hija del director, una niña con un papel que cuenta con una importante participación en la trama y lo hace bastante bien. Se le ve madera de lo que años más tarde mostró interpretando a una jovencita inestable en Picture Mommy Dead.
En conclusión, a pesar de su bajo presupuesto, Tormented es en mi opinión una película que ha sido tratada injustamente solo por formar parte de la filmografía de Bert I. Gordon junto a producciones con monstruos gigantes y por haber sido incluida en uno de los episodios de MST3K.
Tráiler:
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