Volviendo a mis andanzas con mi viejo vicio de ver películas únicamente por su título, no pude dejar pasar a Dead Hooker in a Trunk, sentí que tenía un nombre tan simpático como el de la película de Rutger Hauer, Hobo with a Shotgun. Dead Hooker in a Trunk es la primera película de las hermanas Jen y Sylvia Soska, quienes no solamente debutaron como directoras, sino que además fungieron como productoras, guionistas e interpretaron a dos de los personajes principales: Geek y The Cunt respectivamente.
La premisa de la historia sé que a muchos de ustedes no le resultará extraña. ¿Quién no ha tenido una noche de diversión desenfrenada para al día siguiente encontrar en la maleta del auto a una puta muerta y drogas varias? En una situación así llamar a la policía no es una opción, los protagonistas de nuestra historia ni siquiera recuerdan exactamente lo que hicieron la noche anterior como para afirmar que no están involucrados en ese crimen, así que solo se les ocurre hacer lo que ya deben estar imaginando: intentar deshacerse del cuerpo.
La película es bastante entretenida, yo creía que sería la típica producción de bajo presupuesto que habitualmente reseñamos en este blog, pero se nota que supieron sacarle provecho a los recursos de los que dispusieron y los cuatro actores principales no lo hacen nada mal.
También cuenta con momentos de gore, que si bien muestran tripas de forma muy breve, sí son lo suficientemente sangrientos. Precisamente son esos los momentos más exagerados y absurdos en toda la película.
Por ejemplo, mientras Geek intenta comunicarse con la policía para ponerle fin a la situación, recibe por la espalda un batazo en la cabeza y como consecuencia pierde un ojo. Pero eso no es mayor problema, basta con mantener la calma y tener la cavidad tapada con una mano hasta el momento en el que consiguen teipe negro y le cubren la herida.